El resultado que nadie esperaba de EU
¿Qué dice análisis? En los mercados. Por: Patricia Berry
EU: El resultado que nadie esperaba
De principio a fin, desde las campañas primarias hasta pasada la elección, el proceso electoral de Estados Unidos de 2016 fue inesperado y diferente de cualquier otro en la historia. Los temas de campaña, la retórica violenta de los candidatos, la cobertura y los análisis de los medios, las reacciones de los seguidores de los distintos candidatos – todo reflejó un fuerte descontento entre la población. Salieron a la luz sentimientos y resentimientos que se pensaban superados y erradicados, como el racismo (contra negros, hispanos, musulmanes), el sexismo (las mujeres se siguen considerando inferiores), el rechazo al derecho al aborto, o a los derechos de los homosexuales. Fue palpable el enojo por el proceso natural de desindustrialización de la economía de los últimos 40 años, que ha modificado el mercado laboral, dejando fuera a tantos y tantos obreros.
Este proceso electoral seguramente se analizará durante años, no sólo porque fue totalmente inesperado, sino también por sus múltiples aristas y por las implicaciones sociales, políticas y económicas que pueda llegar a tener.
Hasta la mañana misma del día de la elección, la mayoría de los expertos politólogos, periodistas, analistas e inversionistas en los mercados, preveían que ganara Hillary y que Trump probablemente no aceptara el resultado. El proceso se alargaría, pero al final Estados Unidos terminaría con un gobierno dividido – el ejecutivo demócrata y por lo menos una cámara con mayoría republicana – que es la situación que prefieren los mercados, porque es la que no permite cambios importantes en las políticas. Se pensaba que las políticas económicas de Obama continuarían sólo con pequeños cambios, y que todo seguiría más o menos igual. Wall Street venía reaccionando básicamente bien, con el dólar al alza y las tasas firmes, aunque las acciones bajaron durante los 9 días anteriores a la elección.
Pero sucedió que, conforme transcurrió el tiempo y se empezaron a conocer las encuestas de salida, distrito tras distrito y estado tras estado que se consideraban asegurados por Hillary, sorprendieron votando por Trump.
Al final, Hillary ganó el voto popular, pero Trump ganó la mayoría de votos del colegio electoral y la Presidencia. Por lo que decían las encuestas, probablemente, Trump y los republicanos fueron los más sorprendidos con el resultado.
Al mismo tiempo, los republicanos mantuvieron la mayoría en ambas cámaras del Congreso, y es de esperarse que una de las primeras acciones de Trump, cuando tome posesión, sea el nombramiento del juez supremo que falta, de manera que también tendrán la mayoría en la Suprema Corte. Por primera vez en mucho tiempo, un sólo partido, el republicano, controlará los tres poderes de la unión.
Para no asustarnos de más, es muy importante no perder de vista que el poder de Trump estará limitado porque no es un verdadero miembro del partido; de hecho, varios de los líderes del partido, empezando por Paul Ryan (el líder de la cámara de representantes), se mostraron tan críticos de Trump durante la campaña que le retiraron su apoyo y siempre se mantuvieron a distancia. Muchas de las posturas de Trump, empezando por su rechazo al libre comercio, están en contra de la filosofía republicana, así que sus propuestas seguramente se tendrán que suavizar en las negociaciones con el Congreso.
Los primeros 100 días
Tradicionalmente, los presidentes electos de Estados Unidos anuncian con gran bombo y platillo las medidas que pretenden implantar en los primeros 100 días de su administración, como un ejemplo de lo que harán durante su administración. Las propuestas de Trump, anunciadas en octubre, fueron:
1. Enmienda constitucional para establecer límites a los períodos que pueden servir todos los miembros del Congreso.
2. Congelar las contrataciones de empleados del gobierno para reducir la burocracia a través de retiros, excepto las fuerzas militares, seguridad pública y salud pública.
3. Requerimiento de que para cada regulación federal nueva, dos regulaciones deberán eliminarse.
4. La prohibición de volverse lobbyists durante 5 años para los oficiales de la Casa Blanca y del Congreso a partir de que terminen su servicio.
5. La prohibición de por vida de volverse lobbyists para otros gobiernos para los oficiales de la Casa Blanca.
6. Completa prohibición a lobbyists extranjeros para recaudar dinero para elecciones de Estados Unidos.
7. Las siguientes 7 acciones para proteger a los trabajadores americanos:
1. Anunciaré mi intención de renegociar Nafta o salir del acuerdo bajo el artículo 2205.
2. Anunciaré nuestro retiro del TPP.
3. Ordenaré a mi secretario del Tesoro declarar a China manipulador de su moneda.
4. Ordenaré al Secretario de Comercio y al Representante Comercial identificar los abusos comerciales por parte de otros países que impactan injustamente a nuestros trabajadores y usar todas las herramientas legales para terminar con esos abusos inmediatamente.
5. Levantaré las restricciones sobre la producción de $50mil millones de reservas de energía que pueden producir empleos.
6. Levantaré los obstáculos que pusieron Obama-Clinton para permitir que proyectos de infraestructura energética vital sigan adelante.
7. Cancelaré el pago de miles de millones a la ONU para programas de cambio climático y usaremos el dinero para arreglar la infraestructura ambiental y de agua de Estados Unidos.
8. Comenzaré 5 acciones para recuperar seguridad y la aplicación de la ley:
1. Cancelaré toda acción ejecutiva, memorándum u orden inconstitucional emitida por Obama.
2. Empezaré el proceso para reemplazar al Juez Scalía con alguno de mi lista de 20 jueces, que defenderá la Constitución.
3. Cancelar todo financiamiento para las Ciudades Santuario. Son ciudades en las que se refugian inmigrantes ilegales.
4. Empezaré a sacar del país a los más de 2 millones de inmigrantes ilegales que son criminales y cancelaré las visas a aquellos países que no los acepten de regreso.
5. Suspenderé la inmigración de regiones propensas al terrorismo donde no se puedan hacer las investigaciones con seguridad. Todas las investigaciones serán extremas.
9. Trabajaré con el Congreso para introducir las siguientes leyes y lucharé para que pasen durante los primeros 100 días:
1. Ley de alivio de impuestos para la clase media y simplificación. Es un plan económico para que la economía crezca 4% al año y se creen por lo menos 25 millones de empleos nuevos a través de la reducción y simplificación masiva de impuestos, en combinación con la reforma comercial, alivio regulatorio y la eliminación de restricciones sobre la energía americana. Las mayores reducciones de impuestos serán para la clase media. Una familia de clase media con 2 niños obtendrá una reducción del 35% en sus impuestos. Los renglones de impuestos se reducirán de 7 a 3 y las formas de declaración se simplificarán significativamente. La tasa de impuestos para las empresas bajará de 35% a 15% y los miles de millones de dólares que las empresas mantienen en el extranjero se podrán regresar con una tasa de 10%.
2. Ley para acabar con el offshoring. Establece tarifas para evitar que las empresas liquiden a sus trabajadores para mudar sus operaciones a otros países y luego importar sus productos libres de impuestos.
3. Ley de infraestructura y energía. Incentivos fiscales para impulsar la inversión privada y las sociedades público-privadas para lograr mil millones de inversión en infraestructura en los próximos 10 años.
4. Ley de preferencia de escuela y oportunidad de educación.
5. Ley para la cancelación y el remplazo de Obamacare. Las reformas incluyen reducir los procedimientos del FDA para apurar la aprobación de medicamentos que salvan vidas.
6. Ley para el cuidado costeable de los niños y ancianos.
7. Ley para terminar con la inmigración ilegal. Financia completamente la construcción de un muro en la frontera sur con el entendimiento de que México retribuirá el costo total. Establece una sentencia de prisión mínima de 2 años a los que reingresen ilegalmente después de haber sido deportados, y de mínimo 5 años para los que hayan sido convictos de crímenes, múltiples multas o dos o más deportaciones anteriores. Reforma las reglas de visa para reforzar las penalizaciones por permanecer más tiempo del permitido, y para asegurarse que los empleos abiertos se ofrecen primero a americanos.
8. Ley para restaurar la seguridad en las comunidades. Para reducir el crimen, las drogas y la violencia; desmantelar pandillas criminales y poner a los criminales violentos en prisión.
9. Ley para restaurar la seguridad nacional. Reconstruir las fuerzas militares eliminando los límites al gasto en defensa y expandiendo la inversión militar. Aumento a la ayuda y protección a veteranos.
Protección a la infraestructura vital de ataques cibernéticos. Establece nuevos procedimientos de filtro a la inmigración para asegurar que aquellos que entren al país apoyan a nuestra gente y nuestros valores.
10. Ley para limpiar Washington de corrupción. Nuevas reformas éticas y reducción de la influencia corruptora de los intereses especiales en el sistema político.
Como todos estos anuncios fueron dados a conocer durante la campaña, no podemos descartar cambios ahora que Trump es presidente electo y una vez que quede conformado su equipo de trabajo
Esta noche, Trump anunció que ha designado a Reince Priebus como Chief of Staff – el jefe del gabinete, el principal consejero, el que establece la agenda y el filtro final para llegar al presidente. Priebus actualmente es el presidente del Comité Nacional Republicano, un veterano de Washington y muy cercano aliado de Paul Ryan. Este nombramiento es señal de la voluntad de Trump para trabajar con el Congreso y con el partido para avanzar su agenda. Al mismo tiempo, Trump sigue haciendo cosas difíciles de entender – nombró a Stephen Bannon como estratega en jefe y asesor senior del presidente, un puesto no oficial. Antes de unirse a la campaña de Trump, Bannon tenía un programa de política en radio donde expresaba posturas de extrema derecha, y apoyaba a grupos radicales neo-nazis, de supremacía blanca y anti-semitas, y era sumamente crítico de los políticos en Washington, especialmente de Paul Ryan. A todas luces, Bannon es un personaje por demás molesto para los republicanos.
En los próximos días seguirán los anuncios importantes, sobre todo los nombramientos de los miembros del gabinete. Estos nombramientos nos dirán mucho sobre el tipo de administración que podemos esperar de Trump. Hasta ahora, hay esperanzas de que se trate de personas de reconocida experiencia y con conocimiento del funcionamiento de Washington.
De la mayor importancia para los mercados, se espera que las políticas económicas cambien radicalmente para reflejar la filosofía republicana de libre mercado y un gobierno no injerencista.
Wall Street espera, de entrada:
- La eliminación de regulaciones, que principalmente afectarán positivamente a las industrias financiera, farmacéutica y energética.
- La eliminación y reemplazo, o modificación radical, de Obamacare, que beneficiará a las industrias de los seguros, de salud y sus proveedores.
- Reducción de impuestos para toda la población y para las empresas.
- La repatriación de capitales de las empresas que podrán impulsar la inversión corporativa y el empleo.
- Un fuerte incremento en el gasto de inversión gubernamental en infraestructura y defensa, que beneficiará a las industrias de la construcción y defensa e incrementará el empleo y la demanda por commodities industriales.
- De la mano con el incremento en el gasto y la disminución en ingresos por impuestos, se espera un aumento en el déficit y en la emisión de deuda gubernamental.
- Incertidumbre con respecto al Fed. Las fuertes críticas de Yellen y las decisiones del Fed por parte de Trump durante la campaña hacen pensar que Yellen bien puede renunciar cuando cambie el gobierno, en cuyo caso la política monetaria podría cambiar.
- Revisión de los acuerdos comerciales vigentes, empezando por Nafta, buscando su renegociación. Como parte de esto, es probable la revisión del status comercial de China al declarar al país manipulador de la moneda.
Y estas expectativas se reflejaron rápidamente en los mercados:
Las tasas de interés de los bonos del Tesoro han subido fuertemente ante la expectativa de mayor crecimiento e inflación en el corto plazo, que probablemente se vean reflejadas en un Fed más agresivo. Y también se están considerando las mayores necesidades de financiamiento que tendrá el gobierno para aumentar el gasto en el mediano y largo plazos. El alza de las tasas de los bonos de Estados Unidos arrastraron a las de todo el mundo.
El dólar se ha apreciado contra prácticamente todas las monedas, fuertes y emergentes, impulsado por la expectativa de crecimiento y, sobre todo, el alza de las tasas, que hace la inversión en dólares más atractiva.
El petróleo ha bajado de precio porque continúa la incertidumbre con respecto a un acuerdo entre los miembros de OPEP, por la fortaleza del dólar, y también porque la política energética de Trump alentará la producción de Estados Unidos.
El oro ha perdido terreno ante la fortaleza del dólar y el alza de las tasas, que son su competencia natural.
Las bolsas de Estados Unidos han subido gracias a disparos en los precios de las acciones que se beneficiarán de las intenciones anunciadas hasta ahora – los bancos, todo lo relacionado con salud, las empresas industriales y de materiales, pero han salido golpeadas las de utilities (agua, luz, gas) y las del sector residencial, que se ven afectadas por el alza de las tasas.
Las bolsas de Europa y Japón subieron en un inicio, pero para el viernes y el inicio del lunes ya no parecen tan convencidas. Se tendrá que tomar en cuenta los efectos de las políticas proteccionistas de Trump que han provocado bajas en las bolsas emergentes.
Los mercados de México se han visto fuertemente afectados, una reacción muy natural principalmente por la percepción de desastre que merecidamente se fue construyendo a lo largo de la campaña de Trump. Sin embargo, la verdad es que la retórica de campaña probablemente cambie ante la realidad de que muchas de las intenciones de Trump resultarían perjudiciales para Estados Unidos.
Ante cambios tan profundos, las estrategias de inversión deben reconsiderarse. Por ahora, recomendamos conformar los portafolios con ETF’s de los sectores de Estados Unidos que se benefician de las nuevas políticas, posiciones en dólar trac y una parte pequeña de los recursos en efectivo en pesos. Los activos mexicanos están bajando y lo más prudente es esperar a que encuentren un piso y comiencen a recuperar.
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